Comisión Interamericana de Derechos Humanos expresa preocupación por situación en Venezuela

Comisión Interamericana de Derechos Humanos expresa preocupación por situación en Venezuela

Comunicados de Prensa de la CIDH, 21 de febrero de 2014

CIDH manifiesta profunda preocupación por situación del derecho a la protesta pacífica, de asociación y libertad de expresión en Venezuela

Washington, D.C. – La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha continuado monitoreando y recabando información sobre los acontecimientos que se han registrado en Venezuela en los últimos días, y reitera que se encuentra profundamente preocupada por diversas denuncias sobre supuestas violaciones a los derechos a la protesta pacífica, a la vida, a la integridad y libertad personal de los manifestantes, libertad de asociación y el derecho a la libertad de expresión.

La Comisión ha prestado especial atención a las graves denuncias sobre supuestos ataques de grupos civiles armados en contra de los manifestantes durante las protestas que han seguido teniendo lugar en el país. En este contexto, varias personas resultaron heridas y una fallecida por herida de arma de fuego durante las manifestaciones realizadas en la ciudad de Valencia, estado Carabobo, el día martes 18 de febrero. Asimismo, de acuerdo a cifras ofrecidas por el Ministerio de Interior, Justicia y Paz, otras cuatro personas resultaron heridas de bala y una fallecida en protestas ocurridas en la ciudad de Puerto Ordaz, estado Bolívar, el miércoles 19 siguiente. De igual manera, la información disponible da cuenta de la actuación de estos grupos en supuestos allanamientos realizados a la sede de un partido político en Venezuela.

La CIDH condena cualquier actuación de esta naturaleza y hace un llamado a las autoridades venezolanas a reforzar todas aquellas medidas destinadas a asegurar el desarme efectivo de estos grupos, investigar y sancionar las acciones ilícitas de los mismos y garantizar la seguridad de la población. La CIDH valora que el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, haya rechazado públicamente los hechos de violencia y hecho un llamado al desarme de estos grupos.

Asimismo, la Comisión expresa su preocupación porque persisten las denuncias sobre un uso excesivo y desproporcionado de la fuerza por parte de agentes de seguridad del Estado, y que varias personas habrían resultado heridas producto de la alegada represión en contra de los manifestantes. De igual manera, la CIDH ha dado seguimiento a la situación de un alto número de personas, incluyendo menores de edad, que habrían sido detenidas desde las manifestaciones ocurridas el miércoles 12 de febrero y con posterioridad. La información disponible y puesta en conocimiento de la Comisión, da cuenta de una serie de denuncias sobre casos de detenciones sin orden judicial, falta de presentación oportuna ante una autoridad judicial, el supuesto impedimento de contacto inicial con abogados y familiares, y supuestos hechos de malos tratos en contra de algunas de las personas detenidas por parte de agentes estatales, y mientras se encontraban bajo su custodia.

La CIDH también ha recibido información preocupante sobre supuestas detenciones a periodistas mientras cubrían las protestas, así como agresiones físicas en su contra y la supuesta destrucción e incautación de material periodístico por miembros de la Fuerza Pública. En igual sentido, la CIDH sigue observando con preocupación el alegado bloqueo informativo a medios de comunicación en Venezuela, en un contexto en el cual las autoridades venezolanas han reiterado los llamados de advertencia sobre la posibilidad de aplicar sanciones y suspensión de la transmisión por el tipo de cobertura mediática que realicen sobre la coyuntura registrada en el país. Asimismo, existen denuncias sobre la supuesta suspensión del servicio de Internet en el estado Táchira, lo que estaría impidiendo el acceso a la información a la población de dicha entidad.

La Comisión Interamericana reitera a las autoridades venezolanas que es indispensable que en una sociedad democrática existan garantías suficientes para asegurar que la población tenga acceso al pluralismo y la diversidad informativa, especialmente en relación con temas de interés público y el acontecer nacional.

Por otra parte, la Comisión ha tomado conocimiento del inicio de procesos penales a algunos dirigentes de la oposición venezolana luego de haber participado en las convocatorias de las protestas en el país. En este contexto, al dirigente del partido Voluntad Popular, Leopoldo López, se le ha iniciado un proceso judicial y se encuentra privado de libertad, luego de que altos voceros del Gobierno le responsabilizaran públicamente por los hechos ocurridos durante las manifestaciones del miércoles 12 de febrero.

Tal y como lo ha señalado la CIDH, el Estado tiene el deber de realizar investigaciones de oficio, destinadas al esclarecimiento de los hechos ocurridos en los últimos días y que se establezcan las responsabilidades a que haya lugar. En ese sentido, los procesos judiciales deben ser conducidos de forma diligente e imparcial y con apego a las garantías del debido proceso. Asimismo, la Comisión reitera que resulta de enorme preocupación la alegada utilización del poder punitivo del Estado para criminalizar a los defensores de derechos humanos y la protesta social pacífica, y perseguir penalmente a los críticos o disidentes políticos.

La CIDH lamenta que se hayan producido nuevos hechos de violencia y reitera su llamado al Estado a promover un proceso de diálogo que permita la búsqueda de una solución en el contexto de una sociedad democrática y con pleno respeto a los derechos humanos.

La CIDH es un órgano principal y autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA), cuyo mandato surge de la Carta de la OEA y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. La Comisión Interamericana tiene el mandato de promover la observancia de los derechos humanos en la región y actúa como órgano consultivo de la OEA en la materia. La CIDH está integrada por siete miembros independientes que son elegidos por la Asamblea General de la OEA a título personal, y no representan sus países de origen o residencia.

Posición del gobierno uruguayo ante situación en Venezuela: apoyo y cautela para una salida

Posición del gobierno uruguayo ante situación en Venezuela: apoyo y cautela para una salida

El gobierno uruguayo, por distintas vías, expresó su apoyo a su par venezolano, encabezado por Nicolás Maduro, pero ha puesto el acento en la pacificación de la situación interna y la no intervención en los asuntos internos del país caribeño.

De este modo, el gobierno de Mujica se colocó en una posición equidistante entre el apoyo militante de la Alianza Bolivariana y la postura crítica de Chile y Colombia hacia los posibles abusos en materia de derechos humanos, que puedan estar ocurriendo en Venezuela.

“El gobierno de Uruguay expresa su más firme apoyo y solidaridad a la República Bolivariana de Venezuela ante los lamentables acontecimientos ocurridos el pasado 12 de febrero”, declaró la Cancillería en un comunicado librado dos días después del inicio de las manifestaciones en distintos puntos de ese país.

A renglón seguido la cancillería dijo “defender fervientemente la libertad de expresión pacífica”, pero a la vez “repudia todo tipo de violencia e intolerancia que intenten horadar la democracia y sus instituciones”. El comunicado también expresó el convencimiento de que la salida a la polarizada situación política se encuentra “en el diálogo en la diversidad y la democracia”, lo que permitirá contemplar las consquistas de “los derechos humanos”.

El presidente José Mujica ha sido uno de los pocos mandatarios latinoamericanos que ha hecho manifestaciones públicas respecto a la situación bolivariana. Sin embargo, también ensayó una fórmula alejada de las posiciones extremistas.

“Salirse de la Constitución es un tipo de violencia”, dijo Mujica, al tiempo que hizo explícito su deseo de que en el conflicto no haya “injerencia del exterior”. En una entrevista con TeleSur, el mandatario señaló que “la Constitución venezolana tiene todos los caminos como para poder laudar cualquier pleito. “Por eso salirse de la Constitución es un tipo de violencia”, subrayó.

“Antiguamente podía haber lo que llamábamos guerras justas, sobre todo las de liberación, pero en los últimos veinte o treinta años, (…) todas las guerras y todas las formas de violencia sirven para que se perjudiquen los que ya son naturalmente más débiles”, explicó.
Esta semana, desde Washington, el canciller Almagro hizo escuetas declaraciones a la agencia EFE sobre el proceso venezolano y allí criticó a parte de la oposición venezolana que llamó a derribar al presidente Maduro. Para Uruguay es «condenable» que haya líderes opositores que digan que las manifestaciones deben seguir «hasta que caiga (el presidente venezolano, Nicolás) Maduro».

«Eso es improcedente. Acá se necesitan procesos electorales y se necesita reafirmar la estabilidad democrática, no perjudicarla», subrayó.

Otras posiciones

Distinta fue la postura de los presidentes de la derecha latinoamericana que cargaron las tintas en las violaciones a los derechos humanos que pudo haber cometido el gobierno bolivariano al enfrentar las manifestaciones y las expresiones extremas de algunos opositores.

«Chile respeta la autodeterminación de los pueblos», afirmó el presidente chileno Sebastián Piñera desde el Palacio de La Moneda en Santiago de Chile. «Sin embargo, todos los países que hemos suscrito la Convención Americana de Derechos Humanos, conocida como el Pacto de San José, o que hemos suscrito el protocolo de Unasur sobre el compromiso con la democracia, estamos comprometidos con la promoción, defensa y protección de la democracia, del estado de derecho y de las libertades fundamentales «, cargó el mandatario.

Más sutil, el colombiano Juan Manuel Santos hizo saber “su preocupación” por la evolución de la situación venezolana y llamó al diálogo, pero no se solidarizó con su par Nicolas Maduro.

«Yo le pregunto al presidente de Colombia, por ejemplo; le pregunto al Presidente Piñera de Chile, que han opinado sobre los asuntos internos de Venezuela, les pregunto si una marcha en Bogotá, presidente Santos, es convocada por un líder de la oposición diciendo que va al Palacio de Nariño a sacarlo a usted, ¿qué hace?», respondió Maduro. «¿Defiende al Estado colombiano o le entrega el poder al sedicioso que ha pretendido desconocerlo y sacarlo?, ¿qué hace usted?, contésteme», remarcó el mandatario venezolano.